Picasso
decía:
"Que la inspiración nos encuentre
trabajando..."
Parafraseando
su dicho, decimos:
"que la lucha nos encuentre organizados"
Partamos de la base
que nunca es lo mismo que haya o no un delegado gremial dentro del lugar de
trabajo y la ausencia de conflictos laborales no se debe tomar como indicio
para prescindir del mismo. Aunque la realidad, en la mayoría de los casos, nos
dice que ante mayor nivel de conflictividad laboral, la necesidad de los
compañeros a organizarse aumenta y con ello se empiezan a alzar las voces para elegir delegados
gremiales en los establecimientos, debemos saber, independientemente de lo
dicho anteriormente, cual es la importancia de que los trabajadores se
organicen y elijan libremente a sus representantes gremiales en los lugares de
trabajo.
Es importante que los
trabajadores se organicen en el ámbito laboral ya que es el lugar donde
trabajadores y patrones se relaciona de manera directa.
No olvidemos que las
empresas destinan un gran volumen de dinero en los departamentos de RR.HH, contratando profesionales que intentan
permanentemente enmascarar la explotación del yugo laboral, pretendiendo enfrentarnos unos contra otros.
Esto lo hace por ejemplo
desprestigiando, mediante infundadas
acusaciones, a los compañeros que reclaman por sus derechos y aspiran a
organizarse gremialmente. Muchas veces no nos damos cuenta, y con ciertas
acciones, somos funcionales a los objetivos de las patronales de fraccionarnos
y atomizarnos terminando al final del camino, atentando contra nuestros propios
intereses. ("divide y reinaras" aconsejaría la Burguesía).
Esto no hace más que
debilitarnos, por eso no nos dejemos engañar por los empresarios que subestiman
nuestra capacidad intelectual y en muchas ocasiones hacen que sintamos que son
superiores "agachando nuestras cabezas". No dejemos que nos lleven
inconscientemente hacia sus intereses, en detrimento de los nuestros, ya que
nos usan cuando les conviene y nos descarta cuando ya no nos necesita, sin
tener ningún tipo de reparos.
Porque?
En primer lugar,
porque la convocatoria a representante
gremial en el ámbito laboral es una conquista de los trabajadores, mas aun
si tomamos en cuenta que solo el 12% de
los establecimientos en Argentina gozan de este derecho (fuente: Ministerio
de Trabajo y Seguridad Social de la Nación).
Para reflexionar, ¿Te pusiste a pensar porque las
patronales no quieren delegados en sus empresas?
Por eso no debemos retroceder en esta conquista
y partiendo del Principio de Progresividad del derecho, que otorga nuestro
sistema jurídico, jamás podemos renunciar a un derecho ya que la ley lo prohíbe
al disponer que los derechos son
irrenunciables El empresario utiliza
diferentes estrategias para neutralizar y anular el rol del delegado para
separar a los trabajadores del colectivo.
La organización
gremial nace para superar precisamente la falta de unidad y la pelea individual
con la patronal, para encarar de manera colectiva la lucha por mejores salarios
y condiciones laborales. Esta es una tarea fundamental que nos incluye a todos
para hacer cumplir y avanzar en los derechos laborales. Así será más difícil que
nos puedan embaucar.
Como nuestro poder de
negociación de manera individual es muy reducido y no podemos negociar en
igualdad de condiciones frente a la patronal, la manera más efectiva de hacerlo es colectivamente y mediante la
herramienta jurídica que nos otorga la ley, que es la organización gremial a
través del delegado y la actividad sindical de todos los compañeros. Debemos
comprender esto, que es nuestra necesidad y no entrar en el juego de la empresa
que intenta en todo momento destruir y generar desconfianza entre los
compañeros. Por eso, como mencionamos al principio, a pesar de que no haya
cortocircuitos laborales, debemos estar preparados para que en un potencial
conflicto nos encuentre organizados de
manera tal de asumir y afrontar el mismo lo mas fortalecidos posibles.
Tengamos siempre presente que los que siempre salen
ganando por nuestras peleas, fracturas y divisiones son los empresarios y que
por el contrario, si conseguimos dejar las diferencias personales de lado por
un objetivo en común que nos incluya a
todos terminamos fortaleciéndonos frente a la patronal y conquistando nuestras
reivindicaciones.
Podríamos resumir
esta idea en estas pocas palabras: "si tocan a
uno, tocan a todos".
Hablemos un poco sobre el rol del delegado gremial.
El delegado gremial
es un trabajador elegido por sus compañeros (estén
afiliados o no al sindicato), que se desenvuelve en el seno de la empresa, y es
el que está en contacto directo con ellos. Es
un protagonista esencial de la acción sindical que representa y defiende los
intereses de sus compañeros ante el sindicato y la empresa canalizando los
reclamos de los mismos. Con esto no solo nos referimos a custodiar o mantener las conquistas ya
logradas, sino también a gestionar “mejoras”, o sea, a generar nuevas
conquistas. Nunca actúa solo, sino en acompañamiento con otros delegados,
activistas, trabajadores y muchas veces junto a la dirigencia sindical.
No obstante, no debemos
olvidar que la fuerza organizada de los trabajadores es el verdadero sostén del
delegado.
El delegado no está por
encima de los compañeros, sino que está con ellos y ellos con él; por eso no
debemos confundir el papel del delegado y ver su función desde una posición de
comodidad, como la persona que resolverá los problemas de todos, como la
persona que planteara las cosas que nosotros no nos a animamos a plantear, ya
que el delegado es parte de la organización de los trabajadores, pero la
responsabilidad última es de todos, del conjunto. El resultado de las acciones
gremiales dependerá de la participación y compromiso de cada uno de nosotros.
No nos quedemos en las
quejas aisladas, perdamos el miedo, organicémonos con responsabilidad y unidad.
Terminamos con esta
frase: "La
historia da fe que con organización y lucha es posible transformar la
realidad".