Gremio de farmacéuticos protestó en Misiones por incumplimientos de Farmacity y Farmar al convenio colectivo

El Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos (SAFyB) que lidera Marcelo Peretta rechazó hoy “los incumplimientos de las empresas” en Misiones y aseguró que las compañías inscriben a esos trabajadores matriculados como empleados de comercio para abaratar costos y violentar el convenio colectivo de esa actividad profesional.
“El convenio colectivo determina que los profesionales deben percibir un básico superior a 12.000 pesos, es decir, 5.000 pesos más de lo que ahora les pagan las empresas en Misiones. Ya se informó a los Ministerios de Trabajo nacional y provincial y al Colegio de Farmacéuticos. Hacen falta empresarios que defiendan el papel del profesional”, aseguró esta tarde el sindicalista.
Peretta rechazó de manera formal y pública el incumplimiento del convenio colectivo de trabajo en Misiones, donde “las empresas degradan la matrí­cula de los profesionales al inscribirlos como empleados no cualificados”, y sostuvo que las compañías abonan básicos en torno de los 7.000 pesos, violentando la ley.

El dirigente afirmó también que ya se realizaron presentaciones formales ante las carteras laborales y el Colegio sobre esas irregularidades, en tanto el gremio realizó una protesta pública frente a la gobernación, en la Plaza 9 de Julio de Posadas.
“Las empresas devalúan la matrí­cula, no la respetan y tampoco la profesión, en tanto engloban a esos profesionales con cualquier otro empleado de farmacia. Los farmacéuticos misioneros tienen un básico de 7.000 pesos, cuando el convenio colectivo firmado por el gremio estipuló 12.800. Hay una diferencia de más de 5.000 pesos que se niega a los graduados universitarios”, señaló Peretta.
El gremialista explicó que por ese reclamo la organización “se está movilizando a nivel nacional”, aunque aclaró que en Misiones es donde “se producen las mayores diferencias salariales”.
Peretta argumentó que los empresarios equiparan a los profesionales con los ayudantes de farmacia, igualando a alguien que carece de tí­tulo universitario y, aunque “el gremio tiene el mayor de los respetos por todos los trabajadores, no puede permitir que se iguale aquello que no es igual, ya que la función de un director técnico es asumir la responsabilidad con su matrícula, incluso por las cosas que se hagan en su nombre”.
“Ese ayudante, si comete un error, obliga a pagar los platos rotos al farmacéutico. Hay que dignificar al profesional”, añadió.
El dirigente puntualizó también que “los despachos directos pueden ser realizados por cualquiera, pero la consulta sobre drogas o la toma de presión o las inyecciones recaen sobre el profesional. El empresario debe defender su rol para que su firma mejore y ofrezca un mejor servicio y para que los medicamentos sean utilizados con mayor responsabilidad en el paí­s”, subrayó el dirigente.
Por último, Peretta aseveró que Trabajo de la Nación y el de la provincia conocen la situación y pueden actuar y, el Colegio de Farmacéuticos, también “tomó cartas en el asunto”.
Desde las 20 los farmacéuticos se reunirán en la sede del Colegio de la actividad para analizar esa problemática.